Nicolás Montenegro, es un joven talento, que ha cautivado al universo de la moda con grandes creaciones, sensuales y a la vez elegantes. Su experiencia en otras grandes firmas y su extensa formación han sido la base para crear su propia marca. Nos encontramos ante el futuro, ya es presente, de la moda en España.
Bodegas Hathor, ha sido creada para cautivar y enamorar. Por ello, ha nacido el vino Montepilas, variedad autóctona de Montilla-Moriles. Es la primera vez, que se realiza un vino con esta variedad. Esta Bodega quiere proteger las raíces de la Comarca, apostando por una variedad que se está perdiendo. Se ha conseguido un vino equilibrado y muy aromático, con una fuerte personalidad. Montenegro, ha diseñado la botella que albergará este delicado caldo.
Montenegro y Hathor, dos apuestas innovadoras, sensibles y creativas que se fusionan para crear ilusión y generar felicidad: un diseño como el de Nicolás produce, a quién lo lleva, ganas de vivir y de amar; el vino Montepilas Hathor potencia estos dos beneficios tan necesarios, posibilitando con una copa de vino, hablar y solucionar problemas, porque no olvidemos que así se solucionan los problemas y no con guerras.
El día 8 de marzo se hará la presentación de la grandiosa colección de Montenegro y a su lado, estará Montepilas de Hathor, juntos emprenderán su largo camino, orientado a que todo aquél que lo disfrute le haga la vida más fácil y placentera.
La sensibilidad de un diseñador/a queda reflejada en su obra y su personalidad, su impronta queda visible en su creación. Con sensibilidad, el diseñador comunica y logra crear un vínculo con las personas que admiran su obra. La innovación ha de ser otro elemento clave para lograr empatía con todo aquél que observe la obra de un gran diseñador.
La sensibilidad de un enólogo/a, también queda reflejada en su obra. Éste, crea un vino para transmitir y evocar a quién lo paladea, sensaciones nunca percibidas por el catador. Un vino ha de tener personalidad, te tiene que hablar y contarte de dónde proviene y qué le ha pasado en su proceso de elaboración. La innovación es necesaria en un mundo enológico en el que parece que todo está creado.
Diseño y Enología se funden, creándose un universo nuevo e innovador. Montenegro y Hathor, emprenden juntos un camino.